¿Cuáles son las patologías más habituales del hormigón?

¿Cuáles son las patologías más habituales del hormigón?

El hormigón es uno de los principales materiales de construcción debido a sus propiedades de resistencia a la tracción y compresión, así como también su capacidad para proteger la armadura metálica. Una vez aplicado, se espera que la estructura mantenga su resistencia durante muchos años; sin embargo, es común que en el hormigón se presenten algunas patologías.

Estos problemas en el hormigón suelen deberse a un empeoramiento en la calidad de su estructura o a la existencia de elementos ajenos. Son inconvenientes que se conocen desde hace tiempo, pero cada vez se hacen más frecuentes, por lo que hay que prestar atención para prevenirlos.

Problemas más comunes del hormigón

Entre los tipos de patologías del hormigón encontramos:

1. Carbonatación

Esta patología se da cuando la armadura se oxida. La oxidación del hierro incrementa de volumen y comienza a fisurarse el hormigón hasta llegar al punto de incluso partirse.

2. Fisuras

Las fisuras son una de las patologías del hormigón más comunes. Aparecen cuando la resistencia del material se ve vencida por fuerzas externas.

3. Aluminosis

Esta patología del hormigón se produce cuando hay una reacción entre el árido y el aluminio, a causa de la presencia de una base alcalina en el medio.

4. Reacción árido-álcali

Se da cuando el árido reacciona con la presencia de una base alcalina, por lo tanto es un problema idéntico al de la Aluminosis.

5. Ataque del ión sulfato

Esta patología ocurre cuando entran en contacto el suelo con sulfato de sodio o cloruro de sodio con el hormigón.

6. Erosión

Cuando el componente arenoso del hormigón es expuesto a fuerzas externas, como el viento, la lluvia, etc., comienza a erosionarse.

Análisis de las patologías del hormigón

Es muy importante realizar una detallada inspección de la estructura de hormigón para detectar cualquier signo de patologías. para ello hay que seguir los pasos fundamentales para su análisis:

1. Investigación

En primer lugar, es recomendable, realizar un atento y profundo análisis de los materiales para detectar la presencia o ausencia de problemas.

2. Diagnóstico

Una vez que se ha detectado una patología, hay que establecer un dictamen para conocer su origen e intensidad.

3. Intervención

En algún caso, hay que efectuar ciertas técnicas de reparación, por ejemplo, para las fisuras es necesario realizar una limpieza de la misma y luego confinarla para sellarla.

Medidas para prevenir problemas del hormigón

Para prevenir estas patologías del hormigón, hay que tener en cuenta la relación entre el medio ambiente y el material. Cada vez que se construya con hormigón, se deberá contar con materiales de calidad y -en la medida de lo posible- resistentes a la intemperie.

Además, los componentes del hormigón tendrán que estar de acuerdo con la resistencia exigida para el tipo de estructura (y el entorno). Por último, es importante que los elementos de armadura estén correctamente colocados y sin corrosión, para prevenir cualquier problema a futuro.

Conclusión

Las patologías del hormigón son un problema, pero hay que destacar que la mayoría se pueden prevenir si el material se toma con precaución. Con un análisis cuidadoso y una adecuada intervención ante los defectos detectados, es posible disminuir los riesgos de deterioro a largo plazo. Así, podremos mantener nuestras estructuras de hormigón sanas durante muchos años.

Foto: Poyatos

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